Caminó diez años; se detuvo, miró una piedra y rió.
La arrojó al mar.
Antes de que toque el agua un pez rojo la devoró y se sumergió en silencio. Todo fue calma en ese lugar.
Mirando el agua durmió y soñó con un hombre pez que volaba en el agua.
Despertó de noche, pero no lo sabía. Sólo se dio cuenta cuando amaneció.
Detrás de él había un bosque; en lo noche no existía (no era más que bestias y demonios).
Ahora eran árboles y un camino.
por lucas.
lunes, 28 de julio de 2008
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1 comentario:
Hola Cuqui! Te felicito por el blog, es la primera vez q entro. En qué andarás tantos años...
t mando un beso
Flor Iriondo
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